sábado, 1 de diciembre de 2007

El problema de la NO reprocidad

No es fácil ser amigo de alguien con quien has compartido mucho más que amistad. No es fácil, como digo, abrirse a esa persona, cuando además ha pasado poco tiempo, aún bajo la promesa de "no perdernos".

Cuando lo intentas, cuando necesitas de alguien y acudes a esa persona, le hablas y te escucha, te insiste en que está ahí para lo que necesites, que le importas y puedes contar con ella...Entonces es difícil comprender por qué ella jamás contará contigo, como si la amistad sólo funcionase en una dirección, como si existiese un problema de reprocidad....

Al final, como siempre digo (le pese a quien le pese), lo que importa son los hechos, no las palabras.

2 comentarios:

Alana dijo...

No es fácil, pero se puede conseguir. Evidentemente ambos tienen que poner de su parte sino uno de ellos acabará por hartarse y se distanciará. Pero estoy totalmente contigo en la última frase, cuando los hechos no acompañan a las palabras creo que falta sinceridad y por lo menos a mi me crea mucha desconfianza.

Durden dijo...

Sí, uno termina cansándose y distanciándose...